viernes, 2 de mayo de 2008

MIS TRENES ELÉCTRICOS (o de cuerda)



Parece mentira pero los juguetes que yo siempre he deseado en mi niñez han sido exclusivamente trenes y trenes, aunque a muchos niños lo que les “molaba”, eran espadas y pistolas que a mí nunca me han dicho nada, y siempre por los Reyes pedía un tren eléctrico que indefectiblemente no era eléctrico sino de cuerda, pero ya me estaba bien, recuerdo que mis padres no eran precisamente personas adineradas y mi padre cada año la víspera de reyes iba por la noche a ayudar en una casa de juguetes de la calle Lauria llamada Pupé donde él había trabajado de carpintero en la decoración de la tienda. Les ayudaba en la venta y después adquiría allí los juguetes que por la mañana del día de Reyes encontrábamos mis hermanos y yo en el patio, en un gran cesto de mimbre, lo cual nos producía una ilusión enorme. De un año al otro, siempre conservaba algunas vías que podían complementar las de la caja de éste año. Eran de la escala 0, o sea 1:43, y no fue hasta muchos años después cuando ya me ganaba un jornal de aprendiz cuando empecé a adquirir algún tren (ahora sí eléctrico), en una tienda que todavía existe en la calle Pelayo, PALAU, y había un escaparate a la izquierda, donde siempre ponían las ofertas de segunda mano y compraba lo que podía. Posteriormente y ya con la compañía de mi hijo seguí comprando mas trenes con la excusa de que eran para él, aunque la verdad es que también lo hacía para mí. Nos hicimos una maqueta de 2 por 1 metro que colocamos en su habitación, que cuando estaba guardada, era como un gran cuadro y al bajarla quedaba estupenda para hacer circular los trenes, al principio de escala HO, y después la convertimos a escala N, para poder hacer composiciones mas largas. Voy a poner una foto de parte de la maqueta en escala N, que un día el Siscu me dijo que la quería desmontar para hacer otra de su invención, yo le dije que no lo hiciera porque yo no tenia tiempo para dedicarme a ayudarle pero él no me hizo caso y la desmontó, con lo que nos quedamos sin maqueta durante muchos años, al final volví a montar dos óvalos lo mas grandes que permitía la maqueta, para por lo menos, poder hacerlos funcionar. Cuando me cambié de piso, nos llevamos la maqueta pero ahora está de pié en una habitación sin montarla porque no sé adonde..........ahora conservo todos los trenes en expositores que me he hecho yo y en cajas, con las cuales casi podría poner una tienda de trenes.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Me acuerdo perfectamente de la maqueta (donde yo también jugaba) y de un día en que montaste las vías del Marklin HO por el comedor: pasaban las vías bajo las sillas y era chulísimo, pero siempre te daba pereza montarla, lo que cuando era pequeña me daba mucha rabia!. Ahora lo entiendo perfectamente!
Lo que más me gustaba de la maqueta eran los señores, los árboles, la placa giratoria, las casas, la estación (la de la foto!!)...
BESITOS!

Unknown dijo...

Hombre, hombre, hombre !!
Ya hacía unas cuantas entradas de blog que tu pobre hijito no era culpabilizado ! ;-)
De todos modos es completamente cierto lo que dices, tanto lo de la excusa de que los trenes eran para mí, como lo de la maqueta ! En cualquier caso a mi me gustaban un rato los trenes y me lo pasaba chachi-piruli tanto jugando con ellos, como cuando íbamos a la Soci !

Unknown dijo...

Por cierto, no estoy de acuerdo con el título de la entrada ya que los trenes son míos excepto un par, aunque los usufructes tú ;-)